21:06
Capítulo 719
Por la noche, después de que Jorge llegó, Fabián empezó a platicarle sobre el encuentro Inesperado con Sabrina que habían tenido ese día, exagerando aún más la historia sobre como Sabrina había provocado a Julio.
-Sabrina lo contó todo como si fuera una tragedia, pero en realidad solo fue un rasguño, la herida ya había dejado de sangrar hace rato. Si que sabe cómo llamar la atención y conseguir que todos le tengan lástima.
-Bah, ¿que no quería volver con André? Pues bien que espera que él le cobre venganza.
-Eso de hacerse la difícil… Qué payasada la de Sabrina.
En medio de la penumbra, los ojos de Jorge destellaron por un instante. André seguía hablando por teléfono y no notó nada extraño en Jorge.
Cuando terminó de organizarlo todo, André colgó y se reincorporó a la conversación.
Fabián, que nunca se atrevía a hablar mal de Sabrina frente a André, cambió rápido de tema.
-André, ¿ya averiguaste qué pasó? ¿De verdad Julio fue a buscarle problemas a Sabrina?
El semblante de André se endureció.
-Julio está en el hospital, dice que tiene una fractura de huesos en la mano, destrozada.
Fabián no pudo evitar soltar un silbido de sorpresa.
-Sabrina dijo que ya le había dado una lección a Julio, pero parece que le rompió la mano de verdad. ¡No inventes, sí que se pasó! Eso de que las mujeres pueden ser más peligrosas que nadie, es cierto.
Jorge preguntó:
-¿Quieres que detengamos los pedidos de la empresa de Julio? ¿Usamos el Grupo Olivares para eso?
Un brillo gélido cruzó la mirada de André.
-Solo detenerle los pedidos sería dejarlo ir muy fácil.
Jorge se inclinó hacia adelante, aguzando la voz.
-¿Entonces qué tienes en mente, André?
André, con una expresión impasible, respondió:
-Se atrevió a hacer lo que quiso en mi territorio, y hasta tocó a los míos. Ya es hora de que aprenda lo que pasa cuando se mete con la gente equivocada.
Jorge asintió, entendiendo la gravedad de lo que André proponía.
-La familia Castaño se ha puesto insoportable últimamente. Fidel no deja de buscarle problemas a la señorita Ibáñez, hasta quiere hacer quebrar al Grupo Guerrero. Y Julio, más atrevido aún, casi le arruina la mano a la señorita Ibáñez. Si sigue así, cualquier día de estos hasta podría intentar matarla.
En cuanto Fabián oyó el nombre de Fidel, se animó de inmediato.
-¡Eso, hay que acabarlos! Qué se creen esos Castaño, viniendo aquí a hacerse los importantes.
Jorge bajó la voz.
-André, lo que decidas, yo te ayudo.
André miró de reojo a Fabián, tajante.
Jorge captó enseguida.
-Fabián, lleva a la señorita a dar una vuelta.
Fabián quería quedarse para enterarse del plan, pero al ver la mirada cortante de André, se contuvo y no insistió como de costumbre. Miró a Araceli, esperando que ella convenciera a André de dejarlo quedarse.
-Araceli, ¿estás bien? Si te sientes mal, podríamos…
Pero Araceli le sonrió, interrumpiéndolo.
21.06
Ya, Fabián, vamos a salir primero.
Sebastián había contado todo esto a André por alguna razón. Seguramente, la situación estaba yendo justo como el queria Recordando las palabras de Sabrina, Aracell sentía una alegría desbordante. No era dificil notar que Sebastián habla conseguido la confianza de Sabrina. Ella, incluso, había llegado a tratar a André con desdén por culpa de Sebastián, Tal vez… simplemente, Sabrina estaba completamente atrapada por él.
Y tampoco era raro: la apariencia de Sebastián podía deslumbrar a cualquiera.
Araceli, en el fondo, deseaba que Sabrina se dejara conquistar por Sebastián y terminara con él. Con ese carácter suyo, ya vería cuando Sabrina cruzara su límite, Sebastián acabaría con ella sin piedad.
Al día siguiente, Sabrina apenas salía del edificio con Romeo cuando notó una silueta pequeña esperando cerca de la puerta.
Sabrina se detuvo.
-Mamá,
Thiago, al verla, iluminó el rostro y corrió hacia ella.
Sabrina frunció el ceño.
-Thiago, ¿otra vez saliste solo?
-No–Thiago sonrió, fingiendo inocencia, y señaló hacia un lado-. Papá me trajo, está allí.