Capityfo.606
Capítulo 606
Héctor se quedó inmóvil. Con una mirada firme y helada, observó al Padrino Fantasma. Luego, sacó con sumo cuidado de la parte posterior de su cabeza un dispositivo invisible de rastreo y escucha. ¡Así es, fui yo! Padrino Fantasma, todo lo que acabas de decir fue transmitido palabra por palabra a la policía. Ya es hora de que le quiten a mi padre esa maldita falsa acusación de narcotraficante que ha llevado durante tantos años. Lo que él no pudo decir en vida, yo lo proclamo al mundo en su lugar: jél era un policía!
Varron quedó estupefacto. -¿Héctor, tu padre era…?
–
El rostro del Padrino Fantasma cambió de expresión. ¡Sabía que tu mirada me resultaba familiar! Así que eres el hijo de ese desgraciado hombre.
Héctor afirmó: Sí, el era mi padre.
Varron gritó, colérico: -¡Héctor! ¡Así que me mentiste! ¡Nunca tuviste la intención de casarte sinceramente con mi hija! ¡Solo te acercaste a mí para llegar al Padrino Fantasma!
Entonces Varron por fin entendió: todo había sido parte del oscuro plan de Héctor.
En ese momento, varios autos patrulla se detuvieron afuera. Un gran número de policías uniformados, armados, rodearon enseguida el lugar. Al frente estaba el veterano oficial Syvor, quien gritó a todo pulmón por un megáfono: -Padrino Fantasma, Varron, ustedes están rodeados. Entréguense de inmediato. Lo que les espera es la justicia de la ley.
Un subordinado vestido de negro gritó, alarmado -Padrino Fantasma, ¿qué hacemos? ¡ Estamos rodeados!
El Padrino Fantasma miró con odio a Héctor. Maldito mocoso! ¡Nunca pensé que perdería ante ti! ¡Rendirse no es una opción viable para mi ¡Vamos, saldremos a tiros!
Comenzó así un intenso tiroteo.
Syvor encontró a Héctor, lo agarró del brazo y trató de sacarlo. -¡Rápido, ven conmigo! ¡Este lugar es peligroso!
Héctor lanzó una mirada en dirección al Padrino Fantasma. Este ya había abierto una vía de escape a tiros con varios de sus hombres armados con armas pesadas. Con los ojos sombríos y decididos, Héctor respondió: -No me voy. Mi padre lo dejó escapar una vez en el pasado. Esta vez, no permitiré que lo haga de nuevo.
-Muchacho,
padre y yo fuimos grandes compañeros de batalla. En lo que respecta a su caso, nada pude hacer. Pero ahora, solo quiero protegerte. ¡Vámonos de aquí de una vez!
Syvor quiso llevarse a Héctor.
Pero Héctor giró decidido sobre sus talones y salió corriendo. Corrió hasta ponerse frente al Padrino Fantasma, bloqueándole el paso. -¡No te vas a ir!
Capitulo.606
La mirada del Padrino Fantasma se tornó aterradora. ¡Estás buscando la muerte!
El Padrino Fantasma y Héctor.comenzaron a pelear con ferocidad.
Héctor tenía una gran destreza, pero el Padrino Fantasma no era un oponente débil. En solo un abrir y cerrar de ojos, los dos se enfrascaron en una feroz lucha cuerpo a cuerpo.
Debido a que el Padrino Fantasma estaba retenido, sus subordinados vestidos de negro fueron a la menor brevedad sometidos. Incluso Varron fue arrestado.
¡Padrino Fantasma, esto se acabó! ¡Estamos acabados!– Varron se dejó caer al suelo,
derrotado.
En ese preciso momento, Héctor intentó aplicar una llave de inmovilización, estirando con precaución el brazo hacia él. La mirada del Padrino Fantasma se tornó aún más sombría. De repente, sacó un cuchillo y, aprovechando un descuido, lo clavó directo en el abdomen de Héctor.
Pchsshh….
Se oyó el sonido del cuchillo hundiéndose en la carne. Héctor había sido apuñalado en el abdomen.
Fue entonces cuando Syvor se lanzó sobre el Padrino Fantasma y lo sometió. -Padrino Fantasma ríndete, jesta vez no escaparás!
Unas esposas heladas se cerraron sobre las muñecas del Padrino Fantasma.
Finalmente, el Padrino Fantasma había sido capturado.
Syvor miró asustado a Héctor. -Muchacho, has cumplido a cabalidad con la voluntad de tu padre. Has limpiado su nombre. Lo lograste. Pero estás herido. Rápido, te llevaré al hospital.
Pero Héctor lo empujó con brusquedad -Esto ya terminó. Ahora, tengo que ir a buscar a alguien.
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